
El gerente general del Gobierno Regional de Junín ofreció declaraciones tras la polémica generada por el contrato de S/ 207 millones para la construcción del hospital Manuel Higa Arakaki de Satipo. Este proyecto, clave para la atención médica en la selva central, ha sido puesto en duda debido a los antecedentes cuestionables de la empresa ganadora.
Según el funcionario, el proceso de adjudicación fue transparente y se ajustó a la normativa vigente. Aseguró que la empresa cumplió con todos los requisitos técnicos, legales y económicos exigidos por el sistema de contrataciones del Estado.
Pese a ello, varias voces críticas han cuestionado la falta de experiencia comprobada del contratista y han pedido mayor vigilancia sobre el uso de los fondos públicos. Organizaciones de la sociedad civil exigen una auditoría independiente, mientras que la Contraloría General de la República evalúa intervenir en la revisión del expediente técnico y financiero.
La obra busca beneficiar a más de 150 mil personas de Satipo y zonas aledañas. Representa un avance importante para el acceso a servicios de salud en regiones históricamente olvidadas. Sin embargo, la preocupación por posibles actos de corrupción o malversación empaña este objetivo.
El gerente regional manifestó su disposición a facilitar cualquier inspección. Aseguró que el Gobierno Regional informará cada etapa del avance y que se buscará la transparencia total del proceso.
La ciudadanía, por su parte, exige que se priorice el bienestar colectivo y se eviten errores del pasado. La construcción del hospital Manuel Higa Arakaki no solo es una obra más, sino un compromiso con la vida y el desarrollo de toda la provincia de Satipo.