Controladores aéreos resultaron heridos tras la caída de un ascensor en el Aeropuerto Internacional de Lima. El accidente ocurrió cuando los trabajadores se dirigían a sus funciones. La caída fue repentina y causó gran impacto. Afortunadamente, no se reportaron muertes, pero varios controladores sufrieron lesiones de distinta gravedad.

Los testigos afirman que el ascensor ya presentaba fallas técnicas desde hace tiempo, sin recibir el mantenimiento necesario. Las autoridades aeroportuarias han iniciado una investigación para esclarecer las causas y establecer responsabilidades.

El sindicato de trabajadores exige soluciones urgentes. Además, se solicitó una auditoría completa al sistema de ascensores del aeropuerto. Por ahora, la torre de control opera con personal reducido, lo que podría generar retrasos en los vuelos.

Este accidente pone en evidencia las condiciones precarias de algunas instalaciones clave en el sector aeronáutico peruano. La seguridad del personal debe ser una prioridad.

Los controladores heridos han recibido atención médica y se encuentran fuera de peligro. La comunidad aérea, usuarios y familias esperan respuestas.

Este hecho se suma a una serie de fallos técnicos en la infraestructura del aeropuerto que requieren una atención inmediata.

La seguridad no solo es vital en el aire, también en tierra. Este incidente debe ser un llamado de alerta para evitar tragedias mayores en el futuro.