Elon Musk ha pedido disculpas públicamente a Donald Trump por sus recientes comentarios, admitiendo que fueron “demasiado lejos”. Esta declaración se produce tras una disputa pública donde Musk criticó duramente a Trump, sugiriendo incluso su vinculación con Jeffrey Epstein, acusaciones que luego retractó. Trump, por su parte, respondió con calma, indicando que no le guarda rencor a Musk y que no considera la situación una prioridad.
La relación entre ambos había sido estrecha en el pasado, con Musk desempeñando un papel en la administración de Trump. Sin embargo, las tensiones surgieron cuando Musk expresó su desacuerdo con políticas del presidente y realizó comentarios polémicos en redes sociales. A pesar de la disculpa de Musk, Trump ha mantenido una postura distante, sugiriendo que la reconciliación no es inmediata.
Este episodio refleja las complejidades de las relaciones entre figuras públicas y cómo las redes sociales pueden amplificar conflictos. Aunque Musk ha intentado enmendar su postura, la respuesta de Trump indica que la reconciliación podría ser un proceso largo y complicado.
La situación también ha tenido repercusiones en el ámbito empresarial, con especulaciones sobre posibles impactos en las relaciones comerciales entre las empresas de Musk y el gobierno de EE. UU. Sin embargo, hasta el momento, no se han anunciado cambios significativos en estos acuerdos.
