El Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú (IRTP) se encuentra en el centro de la polémica por un millonario gasto en una nueva sede que permanece inutilizada.

Según un informe de la Contraloría, el IRTP paga más de S/11.000 diarios desde el 11 de agosto por un local que aún no puede utilizar, generando una pérdida significativa para el Estado.

En total, el contrato por este inmueble asciende a S/12.9 millones por 13 años de alquiler, más S/717 mil por dos meses de garantía, y S/2.5 millones adicionales por trabajos de acondicionamiento que aún no se ejecutan en su totalidad. Es decir, el gasto total supera los S/16 millones de soles.

Durante una visita de inspección realizada el 19 de agosto, la Contraloría constató que los trabajos pactados con la empresa inmobiliaria Miski SAC no fueron concluidos. No hay divisiones en los estudios, los baños no están operativos, y áreas clave como camerinos y oficinas siguen inhabilitadas.

Luis Castillo, vocero de la Contraloría, advirtió que mientras no exista un acuerdo con la inmobiliaria, el Estado seguirá pagando sin recibir el servicio. El informe recomienda tomar acciones inmediatas para frenar el perjuicio económico.

Además, este escándalo ocurre en medio del reciente nombramiento de Adriana Rodríguez Jadrosich como nueva jefa del IRTP. Rodríguez es cercana al actual ministro de Justicia, Juan José Santiváñez, lo que ha generado suspicacias sobre la gestión institucional del canal del Estado.

Esta situación levanta cuestionamientos sobre la transparencia del gasto público y la eficiencia en la administración de recursos estatales. El caso del IRTP es un ejemplo claro de cómo el mal manejo administrativo puede generar un enorme daño económico al país.