La ONG Red Balvin Anticorrupción denunció al comandante general de la PNP, Víctor Zanabria, y a 22 altos mandos por irregularidades en la remoción de 48 agregados policiales en el extranjero. Se alega que los cambios favorecieron a personal vinculado a la presidenta Dina Boluarte y al ministro del Interior, Juan José Santiváñez.
Los oficiales afectados fueron designados para misiones de dos años, pero fueron retirados abruptamente, afectando sus proyectos y compromisos internacionales. Además, sus familias sufrieron pérdidas económicas y logísticas al cancelar contratos de vivienda, seguros y matrículas escolares.
Uno de los beneficiados por los cambios fue el comandante Ronald Núñez Díaz, nombrado agregado policial adjunto en Chile, a pesar de estar investigado por su presunta relación con la muerte de Sheyla Cóndor.
El caso ha generado un gasto de más de 2 millones de dólares en viáticos para los oficiales retirados y sus reemplazos. Además, algunos de los nuevos asignados tienen antecedentes disciplinarios y procesos fiscales, lo que afecta la imagen de la PNP.
La denuncia solicita a la Inspectoría General de la PNP:
- Iniciar un procedimiento disciplinario contra los oficiales involucrados.
- Separar preventivamente a los denunciados para evitar interferencias.
- Remitir el caso al Ministerio Público y la Fiscalía Militar Policial.
- Proteger la documentación clave para evitar alteraciones.
Las autoridades aún no han respondido a la denuncia, pero el caso podría desencadenar un nuevo escándalo en la Policía Nacional del Perú.
