El cardenal Carlos Castillo, arzobispo de Lima, se pronunció tras la muerte de Eduardo Ruiz Sanz, el joven de 32 años que falleció durante las manifestaciones del jueves 15 de octubre contra el Gobierno de José Jerí.
Durante su meditación nocturna, difundida por el Mes Morado, el líder religioso expresó su profundo rechazo a la violencia policial y calificó el día como “un día de luto nacional”.

“Hoy es un día de luto para rezar por las personas que han sido vilmente desaparecidas de este mundo y por los heridos, en quienes podemos sentir acciones negativas y desesperadas”, señaló Castillo.

El arzobispo criticó el endurecimiento del corazón del pueblo peruano, al considerar que muchos han perdido la empatía y la compasión frente al dolor ajeno.

“El corazón de nuestro pueblo se ha ido endureciendo. Se ha formado más a la imagen del dinero, la arrogancia y la frivolidad, y menos al corazón de Jesús”, reflexionó.

Castillo también condenó la represión policial que terminó con la vida de Ruiz, víctima de un disparo del suboficial Luis Magallanes.
Pidió una investigación clara y justa para sancionar a los responsables, destacando que la violencia, venga de donde venga, debe terminar.

“No se puede seguir violentando de ninguna manera. Ni los extorsionadores ni quienes, teniendo una función de pacificación, han errado en su actuar”, afirmó.

Con este mensaje, el cardenal llamó a la reflexión nacional y a recuperar la humanidad perdida, invitando a los peruanos a vivir con empatía, justicia y paz.

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