La Policía Nacional del Perú (PNP) atraviesa un nuevo proceso de reestructuración interna luego de las recientes protestas contra el Gobierno de José Jerí, que dejaron un fallecido y más de 100 heridos en Lima.

El comandante general Óscar Arriola Delgado ordenó una serie de cambios en la estructura de mando, buscando mejorar la estrategia de seguridad y control ciudadano. Un documento oficial, al que tuvo acceso Latina Noticias, confirma tres modificaciones importantes en los altos mandos policiales.

El general Manuel Gustavo Vidarte Perrigo asumirá la Jefatura de la Región Policial Lima, mientras que el general José Antonio Zavala tomará el Comando de Operaciones Policiales de la Dirección de Inteligencia (DIRIN). Por su parte, el general Julio Óscar Mariño fue designado en la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirnic).

Estos ajustes responden, según fuentes cercanas, a una reorganización estratégica ante el incremento de la delincuencia y las críticas por el uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones.

El propio general Arriola reconoció que fue un efectivo policial, Luis Magallanes, quien disparó y causó la muerte del manifestante Eduardo Ruiz. En una declaración pública, ofreció disculpas a los familiares:

“Le pido perdón a su familia en nombre de los 140 mil policías”, expresó Arriola, reiterando las condolencias de la institución.

Con estas medidas, la PNP busca recuperar la confianza ciudadana y reafirmar su compromiso con los derechos humanos y la seguridad pública, en un contexto social marcado por el descontento y la exigencia de justicia.

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