
André Carrillo rompió el silencio y habló con sinceridad sobre el paso de Jorge Fossati como entrenador de la selección peruana. Aunque resaltó el buen ambiente en el grupo, dejó claro que el sistema de juego pudo haber influido en los malos resultados.
En entrevista con el programa Cobertura Perú, Carrillo explicó que la relación personal con Fossati fue muy buena. “Nos daba mucha confianza”, dijo. Pero también admitió que había algo que no encajaba del todo con los jugadores. “Probablemente fue el sistema. No lo sé explicar bien, pero había cositas que no entraban”, expresó.
Carrillo reveló que, durante la gestión del técnico uruguayo, el ambiente en el vestuario era extraño. “Había una vibra rara. No era por el entrenador. Era algo que no fluía”, explicó.
El atacante también comparó esta situación con lo vivido bajo el mando de Juan Reynoso. “Con Reynoso también la relación era excelente. Es un muy buen entrenador”, agregó. Sin embargo, en ambos casos, la selección no logró los resultados esperados.
La sinceridad de Carrillo pone en evidencia que, más allá de lo táctico, hay un aspecto emocional y grupal que afecta el rendimiento de la selección. Su testimonio abre el debate sobre la importancia de encontrar no solo al técnico ideal, sino también al sistema que mejor se adapte al estilo del jugador peruano.
Este tipo de declaraciones suele generar eco entre los hinchas y la prensa, especialmente en momentos donde la Blanquirroja busca identidad y rumbo de cara a las próximas fechas de Eliminatorias.
¿Fossati fue el problema? ¿O simplemente no era el sistema adecuado?