El “Mundial de Desayunos” organizado por el streamer español Ibai Llanos ha desatado una ola de orgullo nacional y rivalidad entre Perú y Chile. Ambos países se enfrentan en la semifinal con sus desayunos más emblemáticos: el pan con chicharrón con camote y tamal criollo por parte de Perú, y la marraqueta con palta, huevo y jamón representando a Chile.
La competencia no es solo gastronómica, sino también un duelo de identidad cultural. En redes sociales, el enfrentamiento ha generado millones de votos y comentarios. En Instagram, con más de 4.6 millones de participaciones, Perú y Chile mantienen un empate técnico del 50%. En YouTube, Perú lidera con 459 mil “me gusta” frente a 362 mil de Chile. En TikTok, la diferencia es más clara: 3.9 millones de “me gusta” para el desayuno peruano contra 2.4 millones del chileno.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, no dudó en apoyar la marraqueta, mientras que en Perú, figuras como el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, alentaron a votar por el pan con chicharrón. Esta participación política ha encendido aún más la contienda, trasladando la histórica rivalidad futbolística a un nuevo escenario culinario.
El pan con chicharrón es un ícono de la cocina peruana, nacido en la época virreinal y perfeccionado con el tiempo, acompañado de tamal criollo como símbolo de mestizaje. Por su parte, la marraqueta chilena es considerada patrimonio nacional, con más de un siglo de tradición y un consumo masivo que la ha convertido en símbolo de identidad.
La semifinal del Mundial de Desayunos sigue abierta y el resultado dependerá de la participación del público. Ambos países buscan no solo la victoria, sino también reafirmar el valor cultural de sus raíces gastronómicas.
