Rivaldo Durán Aquino, un joven originario de Panao, Huánuco, ha dado un salto gigante en su carrera científica.

Actualmente realiza una pasantía en la Universidad de Westlake, en Hangzhou, China. Este paso forma parte del Programa de Pasantías de Verano 2025, donde trabaja en el laboratorio de multifísica, estudiando combustibles líquidos para cohetes.

Su objetivo: desarrollar tecnologías que impulsen misiones espaciales a la Luna y Marte. Rivaldo es egresado de la carrera de Ingeniería Mecánica de Fluidos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), y ha fortalecido su formación en países como México, España, Italia y Rusia. Su paso por estas instituciones le ha permitido adquirir experiencia internacional que ahora aplica en proyectos espaciales de alto nivel.

En China, colabora con científicos de talla mundial en la investigación de propulsión avanzada. Esta experiencia no solo representa un logro personal, sino también una oportunidad para conectar sus estudios con el legado del pionero aeroespacial peruano Pedro Paulet. Rivaldo busca aplicar su conocimiento para impulsar el desarrollo tecnológico en el Perú, especialmente en el ámbito aeroespacial, un campo con gran potencial y poca inversión en el país.

Desde las alturas de Huánuco hasta los laboratorios más avanzados del mundo, la historia de Rivaldo es un ejemplo de talento, esfuerzo y visión de futuro. Su caso inspira a muchos jóvenes peruanos a seguir carreras científicas y demuestra que, con preparación y pasión, es posible llegar lejos.

Este joven peruano se convierte en un símbolo de la nueva generación de científicos latinoamericanos que ya están aportando a la exploración espacial global. Su paso por China lo posiciona como un futuro referente en ingeniería de propulsión.