
La justicia avanza. El Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Lima dictó comparecencia con restricciones por seis meses contra Guillermo Soto Meléndez, investigado por tocamientos indebidos en agravio de la actriz Kimberly Pérez. Él no aceptó los cargos y se ordenó su remisión al Juzgado Penal Unipersonal para iniciar el juicio oral.
La agresión ocurrió en la avenida República de Panamá, en Surquillo. Kimberly Pérez —la actriz conocida por su papel en ‘De vuelta al barrio’— denunció que fue tocada por la espalda al salir del gimnasio. Registró el incidente en video y logró que transeúntes arrestaran al agresor. Luego, oficializó la denuncia con la PNP y la Fiscalía.
La Corte ordenó varias restricciones: tiene prohibido acercarse o comunicarse con la agraviada, en forma física o psicológica. Además, debe firmar periódicamente en el sistema biométrico del Poder Judicial. Por su parte, la Fiscalía solicitó iniciar un proceso inmediato para acelerar los plazos judiciales. Tienen como respaldo el video, declaraciones y registros que fortalecerán la acusación.
La gravedad del caso se ve reforzada por las denuncias previas contra el investigado. Según reportes, existirían al menos tres denuncias adicionales por acoso y tocamientos indebidos, lo que profundiza la hipótesis de un patrón delictivo recurrente.
Este caso reafirma la urgencia de abordar la violencia sexual en espacios públicos. Es una señal clara: la justicia no solo protege a las víctimas, sino que también busca erradicar la impunidad. Este proceso legal —y la firmeza con que se ejerce— puede ser un referente para futuras denuncias, impulsando una cultura de denuncia y sanción efectiva.