
En Huancayo, la Municipalidad retomó hoy el control de la avenida Ferrocarril con jirón Ica, tras derribar bloquetas por parte de comerciantes informales. Estos habían tumbado los bloqueos de concreto instalados para frenar la venta ambulatoria. El conflicto estalló en la noche, cuando los vendedores derribaron las barreras. El gerente de Promoción Económica, Edwin Chamorro, calificó el acto como vandalismo y anunció denuncias formales. A su vez, Patricia Alcántara, de Seguridad Ciudadana, indicó que cuentan con grabaciones para identificar a los responsables.
Este enésimo choque entre informales y municipales evidencia la dificultad de ordenar el espacio urbano. El comercio ambulatorio sigue dominando veredas y pistas en el corazón de la ciudad. Pese a reubicaciones y planes, la informalidad persiste. Muchos vendedores con licencias formales se están viendo desplazados o presionados, y algunos incluso exigen medidas firmes contra los informales.
La municipalidad refuerza la vigilancia y anuncia nuevas intervenciones en puntos críticos. Las bloquetas fueron colocadas como parte de un plan urbano para recuperar el espacio público y mejorar la movilidad peatonal. Sin embargo, expertos y comerciantes advierten que sin estrategias sostenibles, los bloqueos solo representan soluciones temporales.
El choque entre orden y subsistencia ha intensificado la tensión. Para muchos informales, el espacio representa su único sustento. Para la autoridad, su uso representa caos, inseguridad y obstrucción del tránsito. El desafío municipal será equilibrar ambas realidades y ofrecer alternativas viables. Analistas recomiendan capacitación, reubicación y fomento de unidades productivas para los ambulantes antes que recurrir únicamente a medidas coercitivas.