
La Copa Perú 2025 sigue regalando momentos insólitos. En Áncash, durante el partido entre Sport Huaquilla y Magdalena CEDEC, el árbitro Luis Alegre tuvo que defenderse de un intento de agresión con una espectacular patada de lucha libre.
Todo ocurrió en el minuto 82, cuando Alegre expulsó a un jugador. Minutos después, un miembro del cuerpo técnico del equipo rival ingresó al campo con una botella en la mano e intentó atacarlo. Sin dudarlo, el árbitro reaccionó con una patada directa al cuello del agresor, dejándolo tendido en el césped.
El incidente generó un caos total. Jugadores de ambos equipos intervinieron para frenar la pelea, mientras que algunos intentaron agredir a la terna arbitral. La Policía Nacional tuvo que intervenir para calmar los ánimos, y el partido fue suspendido.
Este hecho no fue el único insólito de la fecha en la Copa Perú. En Chincha Alta, el partido entre Domingo Dianderas y Eleven Boys tuvo un primer tiempo de solo 35 minutos. La decisión sorprendió a los asistentes, pero luego se explicó que los clubes acordaron reducirlo debido a un retraso en el inicio del encuentro.
La Copa Perú, conocida como el “fútbol macho”, sigue sumando episodios sorprendentes. La violencia en los estadios es un tema recurrente, y este nuevo escándalo pone en debate la seguridad en los torneos locales.
Las imágenes del árbitro ejecutando la patada rápidamente se hicieron virales en redes sociales, donde los hinchas compararon su movimiento con el de luchadores de la WWE. La federación aún no se ha pronunciado sobre posibles sanciones.