
Los países islámicos han adoptado el plan árabe para la reconstrucción de Gaza, en respuesta a la propuesta de Donald Trump de tomar control del territorio palestino. La iniciativa, aprobada por la Organización de Cooperación Islámica (OCI), contempla una inversión de 53.000 millones de dólares en un plazo de cinco años.
El acuerdo se cerró en una reunión de emergencia en Yedá, Arabia Saudita, con la participación de los 57 países miembros de la OCI. Esta decisión refuerza la postura de la Liga Árabe, que días antes en El Cairo había aprobado la creación de un fondo para financiar la reconstrucción de Gaza.
Trump generó controversia al proponer el control de la Franja de Gaza y el desplazamiento de su población a Jordania y Egipto. Su iniciativa fue rechazada por la comunidad árabe e islámica, que apuesta por un enfoque de reconstrucción y estabilidad en la región.
El siguiente paso, según el ministro egipcio de Relaciones Exteriores, Badr Abdelatty, es conseguir el respaldo de la comunidad internacional. Se espera que la Unión Europea, Japón, Rusia y China se sumen a este esfuerzo.
Sin embargo, el plan no especifica el papel que tendrá Hamás, el grupo que gobierna la Franja de Gaza. La Unión Europea ha manifestado su postura en contra de que Hamás tenga participación en el futuro de la región.
La Liga Árabe y la OCI seguirán buscando apoyo para implementar este proyecto, con la esperanza de garantizar estabilidad en Gaza y contrarrestar la iniciativa impulsada por Trump.